martes, 14 de enero de 2014

Capítulo 1.

*Narra Carol*
-¡Mamá! Yo ya casi acabé.- Dije.
-Vale, pues vete bajando la maleta al salón.
-Voooooooy. Emma, ¿tú terminaste con la tuya?
Emma era mi hermana pequeña, sólo nos llevábamos un año.
-No, vete bajando la tuya que a mi aún me falta meter todo el neceser.
-Vale.
Bajé mi maleta al salón, y lo puse junto a mi mochila donde llevaba el iPod, la cartera y los billetes de mi hermana y míos, y obviamente todos los cargadores. De la cámara de fotos y el portátil se encargaba mi hermana.
Subí a ayudar a mi hermana con sus cosas.
-Haber ¿qué te falta?
-Tú recógeme el portátil, el cargador, la cámara y su respectivo cargador.
-Vale.
Recogí las cosas y ella ya había acabado con el neceser. Cerró la maleta y bajamos todo.
Ya estaba mi padre metiendo todo en el maletero del coche.
Cuando acabó nos subimos al coche y pusimos rumbo al aeropuerto. Facturamos las maletas y nos fuimos a cafetería a desayunar.
-Por favor, pasajeros con destino Dublín vayan embarcando. Gracias.
Ese era nuestro vuelo, tardaríamos 2 horas 35 minutos.
La explicación de que ese fuese nuestro vuelo era porque mis abuelos paternos eran irlandeses, mi padre ya había nacido en España dado que mis abuelos, al poco tiempo de casarse, se vinieron a vivir aquí. Mi madre es gallega, pero mi hermana y yo nacimos en Madrid, donde mis padres se conocieron.
Mis abuelos aún tenían en Irlanda su casa, y todos los años vamos allí desde que  nací. Ahora, con casi diecisiete años me encantaba ir, tenía muchos amigos en Mullingar.
El vuelo pasó rápido: fui escuchando música, hablando con mi hermana y durmiendo.
Me despertó la voz de la azafata comunicando que nos abrocháramos los cinturones porque íbamos a aterrizar.
El aterrizaje fue perfecto. Cogimos nuestras maletas y nos fuimos a casa, tenía ganas de ver a mis abuelos, llevaba tres meses sin verles, ya que habían vuelto a su pueblo natal para arreglar la casa un poco.
Cuando llegamos a casa solté la maleta y la mochila y fui a abrazar a mis abuelos.
Mi hermana y yo dormiríamos juntas, así que fuimos a colocar todas las cosas.
-Emma, me están diciendo que se fueron de vacaciones a Nueva York.
-Pues yo quería verlas, las echo mucho de menos cuando no estamos.
-Hombre, son nuestras amigas, yo también quiero verlas.
-Bueno, siempre podemos hablar por Skype.-Me dijo mi hermana.
-Es verdad.
-Bajemos a merendar.
Bajamos y mi abuela había hecho chocolate con churros para merendar.
-Muchísimas gracias abuela. Te quiero.-Dijimos mi hermana y yo a la vez.
-Cariño-me dijo mi abuela- pasado mañana es tu cumpleaños, ¿qué vas a querer?- Me preguntó.
-Pues la verdad es que no lo sé. Lo que vosotros queráis.
-Vale. Ya miraré algo.
-Emma y yo nos subimos a la habitación. Os queremos.
-Chao.-Contestaron todos.
 Subimos y encendimos el ordenador. Pusimos la música de nuestro grupo favorito; One Direction.
Nosotras sabíamos que Niall Horan, era de Mullingar, pero por desgracia nunca pudimos verlo.
Así pasamos mi hermana y yo la tarde, cantando, bailando y riendo.
A la hora de cenar nos vino a avisar mi madre de que la cena estaba lista.
Cenamos mientras contábamos lo que habíamos hecho en estos tres meses, nos preguntaron por las notas, la verdad es que fueron espectaculares las de las dos. Acabamos y recogimos la mesa y fregamos entre los seis. Después nos fuimos al salón a ver una película que echaban en la tele.
La película terminó a las doce, así que todos me dieron las felicidades.
-Hija, aquí tienes nuestro regalo.-Mis padres me dieron una cajita. Lo abrí con cuidado, no sabía si era frágil.
Mi cara era un poema, no me podía creer lo que estaba viendo. Empecé a gritar y a llorar.
-¡MUCHÍSIMAS GRACIAS DE VERDAD! OS QUIERO.-Abracé a mis padres todo lo que podía.
-De nada cariño.
Mi hermana, como siempre impaciente, no dejaba de preguntar lo que era, así que le enseñé la entrada para One Direction, en Londres. Gritamos las dos.
-Espera, espera. ¿Yo no puedo ir?- Preguntó mi hermana.
-Es que no nos dejáis hablar. Carol, por favor, mi cuantas hay.-Me dijo mi madre.
-HAY DOS EMMA.-Grité.
-No me lo puedo creer.
-¿Y cuando es, y dónde?- Pregunté.
-Pues en tres días en Londres.
-¿Y cómo vamos a ir?
-Con esto.-Dijo mi abuelo entregándonos dos billetes de avión que sale en dos días hacia Londres.
Me tiré encima de todos ellos y los abracé muy fuerte. Estaba totalmente feliz.
-Allí tenemos una casa que está arreglada.- Mis abuelos me entregaron las llaves.
-GRACIAS.-Gritamos mi hermana y yo.
Nos fuimos a la habitación en la que estuvimos gritando, riendo y llorando de la emoción. Volví a mirar las entradas y empecé a hiperventilar. Mi hermana preocupada me estaba zarandeando para que reaccionara. Cuando ya estaba más o menos recuperada le enseñe que las entradas tenían meet and greet. Las lágrimas volvían a salir de nuestros ojos y la respiración era entrecortada.
-CAROL QUE VOY A CONOCER A HARRY.-Gritó.
Harry era su favorito, le amaba.
-Y YO A NIALL.-Grité.
Mi favorito no era Niall, pero una auténtica directioner está enamorada de los cinco. Mi favorito era Louis.
-Voy a abrir el twitter.
Anuncié que iba a ir al concierto y publiqué que estaba en Mullingar, y unas fotos que nos hicimos mi hermana y yo en el jardín. Vi que tenía una mención y un retweet. Ahora si que acababa de morir. Era Niall, y me contestó a mi tweet de que estaba en Mullingar poniendo "¿A qué es precioso? xx". Yo contesté afirmativamente. También me había seguido. Decidí contárselo a mi hermana que estaba de los nervios y gritando.
-Ojalá Harry me hiciese eso alguna vez.
-Es demasiado fuerte.
Yo también estaba de los nervios pero preferí callarme y no decir nada.
Publiqué el último tweet en el que me despedí para intentar dormir, y digo intentar porque dormir con todo lo que había pasado hoy iba a ser difícil.
A eso de las tres de la madrugada me acabé durmiendo.
Solamente dormí cuatro horas, no podía más, pero como me daba pereza levantarme con lo calentita que estaba en cama cogí mi blackberry y me conecté al twitter, donde tenía un mensaje privado de quien menos me lo esperaba. Sí, Niall. El mesaje decía: "Así que vas al concierto? Espero conocerte,  y disfruta de Mullingar xx". No había mejor despertar que ese.
Le contesté y mi hermana se despertó, le conté todo y bajamos a desayunar.
-¿Os queréis ir hoy para Londres?- Esa pregunta que salió de la boca de mi madre me pilló desprevenida, al igual que mi hermana, que escupió todo el cola cao.
-¿Perdón?- Pregunté yo.
-Si, me lo dijo ayer la abuela. Pensando que así teníais más tiempo para hacer turismo y demás.
Sin contestar a nada, mi hermana y yo salimos de la cocina hacia nuestra habitación para volver a hacer la maleta.
Cuando acabamos las dejamos en la puerta para bajarlas y que nos llevasen al aeropuerto.
-Adiós abuelos, nos vemos en unos dias. Os queremos.-Nos abrazamos y cogimos el equipaje .
Ya en el aeropuerto, con las maletas facturadas, nos llamaron para embarcar, por lo que nos despedimos de nuestros padres y desaparecimos por la puerta que nos llevaría al avión que cambiaría mi vida, y la de mi hermana.
*Narra Emma*
Aún no me creía nada que lo que está pasando, fue tanto en tan poco tiempo...
Pasamos el poco tiempo de vuelo escuchando música y hablando.
Llegamos a Londres, recogimos el equipaje. En la salida cogimos un taxi para llegar a casa para descansar.
Tardamos 45 minutos en llegar, llegamos a casa, abrimos y nos llevamos la sorprenda más grande de todas.
-¡SORPRESA!-Gritaron todas.
Mi hermana y yo soltamos las maletas y empezamos a correr para abrazar a nuestras amigas de Mullingar y la mejor amiga de Carol, Laura. Estábamos llorando todas, las cinco abrazadas en medio del salón.
-¿Pero qué hacéis aquí? ¿Vosotras-dijo Carol señalando a las irlandesas-no estabais de viaje? ¿Y tú Lau? ¿Por qué nadie me avisó?
-Porque era una sorpresa. Y tenemos otra.-Y sacaron las entradas de sus respectivos bolsos.
Estuvimos llorando y riendo, contándonos como nos iba todo. No teníamos nada para comer así que decidimos salir a comer por ahí y así por la tarde hacíamos un poco de turismo por la preciosa ciudad inglesa.